¿Para qué hablamos de literatura?


Noe Vásquez Reyna_ perfil Casi literalHay días como hoy que me robo las conversaciones de un chat para abrir como bisturí una idea, porque necesito un respiro de la coyuntura política en vísperas de las elecciones generales en un país como Guatemala, que llora, escupe y balbucea desigualdad.

Hablemos de literatura, ese supuesto arte de la expresión verbal. Pasa que cuando hablo de libros con alguien pueden suceder cosas inesperadas. La conversación se alarga, aparecen títulos nunca escuchados, coincidencias entre autores, gustos, manías, obsesiones. Me fascina cuando se torna en un auténtico compartir que usa pretextos para sabernos de nuevo humanos.

Por lo regular me cuesta encontrar con quien hablar de libros. Seré persona rara, pero me molestan las listas de memoria, los supuestos libros que «deben ser leídos» y que se recitan como en competencia que destila vacíos. Me cansan las pretensiones, la erudición forzada, los egos inflados de quienes escriben y hablan con prepotencia sobre saberes, no digamos las «opiniones expertas». Hablamos de libros en chats como de una compra de supermercado; es funcional, claro, pero…

No quiero hablar de libros ni de literatura así. Tampoco con la ebriedad o adicción típica de los llamados círculos bohemios, los natos artistas, los irreverentes adolescentes que ya tienen treinta, cuarenta, cincuenta… ¿No embriagan las historias por sí solas? ¿De qué habla la literatura? ¿Para qué hablamos de literatura? ¿Como excusa para un alcoholismo solapado y tolerado?

Las mejores pláticas sobre libros las he tenido entre pasillos de oficina, no en presentaciones de títulos recientes. Las sensaciones más intensas suceden cuando las palabras coinciden con la mirada de quien se emociona con lo que recuerda de una historia; cuando crece una emoción con esa mirada y lo que sigue con las palabras del otro, de la otra: una conversación real.

Disfruto mucho los clubes de lectura donde confluye gente de todo tipo, sobre todo los que nos permiten escuchar palabras sencillas basadas en emociones y opiniones distintas que incluso puedan irritar y sacudir las propias. ¿De qué otra cosa habla la literatura, sino de la vida, de los espejos que nos muestran lo terrible y nefasta que puede ser la humanidad, y lo necesario que es verla de otra manera? ¿No nos muestra personajes de toda moral y apariencia? ¿No hablan los libros de la vida de otros seres humanos tan imperfectos, volátiles y cambiantes como nosotros?

¿Han hablado con un niño sobre algún libro? ¿Hemos podido lograr que una niña tenga la opción de sacar sus propias conclusiones de una lectura que le pudo interesar/emocionar? Esas sensaciones inesperadas son las que me devuelven las ganas de seguir creyendo que se lee y se escribe para no repetir espirales de violencia, de idiotez, de crueldad, de desigualdad, de conformismo.

¿Quién es Noe Vásquez Reyna?

¿Cuánto te gustó este artículo?

Califícalo.

0 / 5. 0


3 Respuestas a "¿Para qué hablamos de literatura?"

  1. ¡¡¡Quiero hablar de literatura contigo!!!
    Gracias por tus maravillosas reflexiones.

  2. Jose Humberto Cerda Garcia dice:

    Interesante la idea temática que abordas, y motiva más cuando esa experiencia de hablar de literatura, no solo por conocer esa importante opinión o acervo cultural que persona alguna manifiesta, sino por construir ese puente de comunicación que relaciona la vivencia de los interlocutores, que a la postre puede generar nuevas ideas, motivaciones y formas de entender el sentido de la vida de los demás.. En lo personal el problema de encontrar en algún momento amigos o persona que deseen conversar sobre literatura a mi me ha pasado, pero al funal diafruto literariamente de esa realidad..Saludos.

  3. Jose Humberto Cerda Garcia dice:

    Interesante la idea temática que abordas, y motiva más cuando esa experiencia de hablar de literatura, no solo por conocer esa importante opinión o acervo cultural que persona alguna manifiesta, sino por construir ese puente de comunicación que relaciona la vivencia de los interlocutores, que a la postre puede generar nuevas ideas, motivaciones y formas de entender el sentido de la vida de los demás.. En lo personal el problema de encontrar en algún momento amigos o persona que deseen conversar sobre literatura a mi me ha pasado, pero al funal diafruto literariamente de esa realidad..Saludos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

desplazarse a la parte superior