…Me imagino que en este momento debes estar ansioso preparando tus maletas, comprando recordatorios y lanzando oraciones porque tu sueño de conocer al Papa Francisco se hará realidad, y no es para menos. Capaz que has estado haciendo actividades desde tu parroquia para poder costear los buses y aviones que debes tomar para llegar a Panamá, pero te escribo esto porque talvez no sepas que tu alegría no es tan alegre en el país que te recibirá, por más que te hayan dicho lo contrario o hayas visto videos promocionales del gobierno con panameños sonrientes, pues hay realidades oscuras tras esto que tú evocas como una gran celebración de la juventud católica mundial.
Para muchos panameños, la Jornada Mundial de la Juventud no pasa de ser un capricho de muchos millones de dólares del Presidente de turno, Juan Carlos Varela, que se vende en el extranjero como un buen samaritano y cuya esposa, Lorena Castillo, asiste fielmente a toda actividad papal que pueda pagar con los impuestos del Estado. Ambos hablan de amor al prójimo sin que falte al final de sus discursos un «Dios los bendiga», pero son los mismos que avalan órdenes para reprimir protestas de agricultores por el derecho a la soberanía alimentaria y el buen vivir, los que sancionan los presupuestos de la nación reduciendo los montos destinados a cultura, ciencia, salud, educación y tecnología, y los que aseguran que no hay fondos para investigar casos de abuso sexual denunciados en áreas de difícil acceso.
El señor Juan Carlos Varela, querido peregrino, es quien los recibirá y públicamente les dirá que Panamá les está mostrando su mejor rostro porque no se atreverá a decir la verdad: que lo que realmente están usando son máscaras sonrientes, porque tras esa gran tarima de $12.4 millones de dólares donde se pararán él y el Papa, no se ven los docentes que llevan meses sin cobrar, tampoco los pacientes que perdieron citas por falta de insumos o los jubilados que pasaron más de cuatro horas en una fila para recoger medicamentos que al final no recibieron por falta de presupuesto.
Al final, cada vez que me llega una nueva noticia de lo que se está gastando en la Jornada Mundial de la Juventud se me hace un nudo en la garganta porque la mayoría de las contrataciones se están haciendo de forma directa, lo cual quiere decir que no es que nunca haya habido dinero para el techo que se está cayendo en una escuela o en el departamento de urgencias del Hospital del Niño, tampoco es es que no haya fondos para las zapatillas de los atletas o los guantes para los boxeadores que iban a las Olimpiadas, pues siempre hubo esos fondos, pero simplemente nada de esto parecía prioritario.
Que $14 mil dólares en una alfombra para recibir el Papa, que $18 mil para seis perros, que $1 millón y medio en barras metálicas, que $12 millones en una tarima, que $245 mil en alquiler de vehículos, que $7.7 millones en seguridad que incluye armas, que casi $1 millón en habitaciones de hotel de lujo para «invitados especiales», que $145 mil en tarjetas inteligentes para vehículos, y así nos vamos sumando cada día con nuevas licitaciones de las cuales no tenemos más información que la que aparece apenas garabateada en el portal de Panamá Compra, sin justificación lógica de su adquisición y sin responder al derecho ciudadano de exigir y recibir información sobre el buen uso de sus impuestos.
No me malentiendas, peregrino, de verdad que entiendo que un evento de esta magnitud deba tener sus gastos, sin embargo, ¿crees que todos los panameños, incluso los no católicos, deban pagar para que se celebre la Jornada Mundial de la Juventud? ¿Te parece bien que todos los panameños deban modificar su modo de vida durante casi dos semanas a causa de este evento? ¿Te parece justo que a los funcionarios del sistema de salud y del sistema de seguridad les hayan vetado su derecho de pedir días libres o vacaciones durante todo el mes de enero? ¿Crees justo que hayan dado órdenes a hospitales de aplazar citas cuando hay pacientes que demoran hasta tres días para llegar a un hospital especializado? Peregrino, sé que tienes el corazón en el lugar correcto, también tuve una enseñanza católica y algo básico que nos enseñan es que debemos amar a nuestro prójimo, y es por eso que te pregunto, ¿tú crees que eso es amor?
Por ahí nos dicen que esto nos «beneficiará» a todos, pero no encuentro de qué manera. Nos dicen que «activará» la economía, que en teoría ustedes, peregrinos, generarán ganancias al país al quedarse en hoteles; pero en cambio, Monseñor Ulloa nos reclama por la televisión que no somos suficientemente solidarios en abrir nuestras casas a los peregrinos y que deberíamos hospedar a quienes no duerman en escuelas, y luego nos reiteran que ingresos habrá porque ustedes gastarán en restaurantes y farmacias, y eso implica también que el pequeño empresario se beneficie directamente, pero cuando reviso la página de Panamá Compra veo que dentro de las licitaciones hay convocatorias para preparación, transporte y entrega de alimentos y víveres para la pre-jornada, la Jornada Mundial de la Juventud y la jornada extendida, por lo cual, mi única conclusión es que el Gobierno nos miente cuando nos dice que «nos beneficiaremos» y que debemos «sacrificarnos» para mostrar nuestra mejor cara, pues, a fin de cuentas, Panamá es como lo dice su escudo: Pro mundi, beneficio.
Te soy sincera, peregrino: yo creo que lo justo sería que la misma Iglesia lo pagara. Todos sabemos que tienen suficientes fondos para erradicar con el hambre mundial, así que no creo que un pequeño acontecimiento les represente mayor gasto; además, este es un evento que se hace para que sus fieles se reúnan. Por eso, querido peregrino, te pregunto: ¿Tú crees que Jesús, que fue un gran revolucionario, que se enfrentó a la hegemonía del Imperio Romano, participaría de un evento que más que beneficios representa la hipocresía de quienes usan su nombre en vano?
†
¿Quién es Corina Rueda Borrero?
Excelente escrito. Muy bien dirigido. Felicidades. Me enorgullece como mujer después de leer un poco de su profesionalismo.
Excelente línea de pensamiento con sólida argumentación. Lo compartiré.
Yo estoy en contra de la gestion del presidente pero atacar a un evento que se dirige al mundo entero y que coloca a panama en el ojo del mundo tampoco lo comparto.
Excelente comentario. Coincido contigo.
Otra rémora más que necesita pegarse a los grandes personajes para poder nutrirse con lo que no consigue en su oscurantismo existencial.
Soy panameño de nacimiento. He vivido en éste mi país durante 58 años, toda mi vida. Y cierto es que como cualquier otro país hemos tenido y tenemos nuestros problemas, y lo más seguro es que podemos seguir teniéndolos, pero la gran mayoría de nosotros los panameños si esperamos con ansias, aceptación y profunda devoción esta Jornada Mundial de la Juventud 2019. Y crean jóvenes peregrinos que aparte de un minúsculo grupejo, detractores de hasta su propia vida y existencia, serán siempre bienvenidos con nuestros corazones y calor abiertos a ustedes. Esta no es una actividad de Juan Carlos Varela, que como otros anteriores presidentes ha tenido sus grandes errores, si no de todo un pueblo panameño orgulloso de serlo. ¡Bendiciones a todos y bienvenidos!
Soy panameña de nacimiento, tengo 21 años y no estoy de acuerdo con la manera en que se ha invertido el dinero en nuestro país y mucho menos con la gestión del gobierno actual y creo que si tú piensas lo mismo deberías dirigirte tu mensaje a los gobernantes del país y no a los peregrinos, ya que ellos no tienen la culpa de la ineptitud del pueblo por escoger este tipo de gobernantes, gobernantes que quizá tú o alguien de tu familia o amigos escogió y ahora reprochan. La culpa es del pueblo y del gobierno, deja la osadía de meter a terceros.
Aunque podemos considerar que algunos argumentos son válidos, es claro el interés de atacar a la iglesia católica. Parece que la joven autora no considera su educación católica como la base de su formación como persona pensante. Además, los gastos que hace el gobierno los hace y lo hará cualquier gobierno para recibir a algún mandatario, máxime al papa, quien duélale a quien le duela, tiene la mayor estatura moral a nivel mundial. La mayoría de los gastos de los peregrinos la pagan ellos mismos y la iglesia. Por otra parte, pedir que la iglesia católica, lo que implica a la feligresía católica, cubra todos los gastos del encuentro porque es un evento católico, es lo mismo que pedir que los juegos centroamericanos los paguen los deportistas, entrenadores y aficionados solamente.
Aunque podemos considerar que algunos argumentos son válidos, es claro el interés de atacar a la iglesia católica. Parece que la joven autora no considera su educación católica como la base de su formación como persona pensante. Además, los gastos que hace el gobierno los hace y lo hará cualquier gobierno para recibir a algún mandatario, máxime al papa, quien duélale a quien le duela, tiene la mayor estatura moral a nivel mundial. La mayoría de los gastos de los peregrinos la pagan ellos mismos y la iglesia. Por otra parte, pedir que la iglesia católica, lo que implica a la feligresía católica, cubra todos los gastos del encuentro porque es un evento católico, es lo mismo que pedir que los juegos centroamericanos los paguen los deportistas, entrenadores y aficionados solamente.
Me alegra leer los comentarios. Al menos no soy el único que ve esto como un ataque a nosotros mismos los panameños. Una vez que el Papa dijo que la proxima JMJ seria en Panamá las cartas estaban hechadas. Nos gustara o no. Es un evento mundial . Es necesario informarse y analizar antes de opinar. Si hacemos eso entendemos porque la «tarima» cuesta 12 millones y hasta piensas » chuzo hicieron milagros con esa plata». Con un evento de esta magnitud no puedes solo poner al Papa en podio.
Acabo de leer una entrevista al señor que le quitó el hotel a Trump y dice que Panamá tiene todas las condiciones para ser un referente de turismo en la región y los panameños no sabemos aprovecharla. No nos disparemos en el pie aprovechemos nuestro mejor activo, nuestra posición geografica. Este evento tiene un efecto multiplicador.
Mas daño al país estaría causando el que alguien – tipo de perfil de peregrino – que les esto. Mala, jovencita.
Hay cosas que le faltaron:
1-Hay partes de la Ciudad de Panamá que ni feo la miraban, ahora las han puesto bonitas. Aparte de la infraestructura, se han llevado a varios piedreros a quién sabe donde disque para rehabilitarlos durante la JMJ, creo que al Papa no le gusta ver gente fea: nada como el mítico JC, que a ese no importaban nada…
2-Los 12 millones en la tarima son un pequeño detalle al lado del ENORME recurso humano, altamente especializado, utilizado para este evento. Los médicos, el personal administrativo, abogados, etc que no cuestan dos reales, pero el gobierno quiere disque convertirlos en «voluntarios» para que trabajen GRATIS durante la JMJ.
3-Este blog DE A MALAS lo leen los autores, por lo tanto inserté el enlace en un tuit con el hashtag de la JMJ.
4-Aunque el idioma oficial es el español y es un idioma muy grande, el inglés es de mayor tamaño.
Relación Iglesia ( católica en nuestro caso) y el estado…
El Estado debe demostrar equidad para todos… una actividad así demuestra lo contrario.
Esta actividad me compromete a cambios que NO pedí y de los que no pensaba ser «voluntaria» . Me cambia horarios en mí trabajo, compromete una semana de mis clases en la universidad, me trasladan a otra área de trabajo….para decir algunas cosas.
Leo esto por segunda vez, antes de que ocurriera el gran evento y ahora. Han pasado casi dos meses desde la JMJ y Panamá sigue en crisis y los beneficios tan prometidos siguen siendo inexistentes. Gracias por escribir esta pieza, se nota el corazón y tu preocupación por el rumbo del país. Las prioridades en Panamá están de cabeza, como escribió Demetrio Herrera Sevillano: «paisano mio, panameño tú siempre respondes que sí» y también se nos olvida decir que no a las cosas que verdaderamente nos afectan económicamente, y seguimos diciendo que «no» a cosas prioritarias (por ejemplo, educación integral, educación sexual, más derechos reproductivos, equidad de género, etc.)
Excelente pieza.