El principito: más que un libro para niños


Corina Rueda Borrero_ Perfil Casi literalRecientemente se estrenó a nivel mundial la película basada en la célebre obra de Antoine Saint-Exupéry, El principito, la cual por una extraña razón aún incomprensible para mí, es clasificada como literatura infantil. Y ciertamente lo es en parte, pero limitarse a encerrarla sólo dentro de esa etiqueta es un gran desacierto. Hablamos de una obra que contiene implícita una crítica social visible a cualquier tipo de lector, es una burla al sistema y ciertamente es una pieza fundamental de la literatura universal. Todos los pasajes que en ella se presentan son, afortunada y lastimosamente, reflejos de la realidad humana.

En el caso particular de Panamá, más que llegar una película a nuestras salas de cine, llegó una representación teatral: B12 Un viaje al Sol, del dramaturgo Jhavier Romero, la cual yo en particular describiría como la representación metafórica de El principito cuyo contenido, enfocado para todas las edades, pero con la inminente inclinación hacia los niños a fin de cuentas, no se va hacia lo extremadamente complejo, aunque conservando su carácter profundo y reflexivo, necesario en una época (todas las épocas en realidad) en que subestimamos el nivel de comprensión de los más pequeños y sobrestimamos nuestra experiencia.

Si bien Saint-Exupéry nos da a entender en la dedicatoria a su libro es que el mismo es para niños y niñas (hago la inclusión de género obligada aquí), ya sea que lo seamos cronológicamente o lo tengamos aún vivo dentro de nosotros, personalmente considero que El principito como pieza literaria —y también dentro de sus diversas adaptaciones— no distingue edades y con certeza cada vez que lo leemos encontramos algo distinto, exteriorizando así la dicotomía entre la infancia y la adultez, ese conflicto constante entre ambas y cómo una resulta siendo sepultada por la otra a causa de las aparentes responsabilidades que se incurren con la edad.

Si revisamos el contexto histórico y la vida del autor para hacer una comparación con la obra, nos daremos cuenta que su vida se encuentra impresa de forma metafórica en toda la obra, desde el Sahara en que cae su avión, los paseos por los diferentes planetas que visita el personaje principal (en los cuales encontramos los modelos a seguir de nuestra sociedad y que insistimos en seguir) hasta conocer el buen zorro que es el símbolo de la amistad.

La inocencia es un elemento crucial en esta obra porque a pesar que el Principito se encuentra en la mayoría de sus circunstancias con adultos mentes cuadradas siguiendo un librito, él insiste en ser él mismo y romper las reglas de los mayores con la dulzura de la niñez. Qué hermoso sería que todos regresáramos a esa etapa de inocencia donde las estructuras son absurdas, la creatividad es una forma de vida y la amistad es indispensable.

En definitiva podría pasar páginas hablando de cómo esta obra me ha tocado una y otra vez, y el sin número de interpretaciones y trasfondos que tiene cada uno de sus pasajes, pero me enfocaré nuevamente en El principito como mucho más que un libro infantil. Lo es porque plantea de forma sencilla y profunda las diversas relaciones humanas y toda la gama de emociones que surgen de ellas; porque denuncia la estupidez humana de quienes creen conducir a los niños hacia lo que resulta “correcto”, evitándoles un necesario cuestionamiento de nuestra realidad; porque nos hace reflexionar por qué cuando somos adultos reprendemos a los niños en nuestro afán de hacerlos pensar de forma “madura” y “racional”; porque reta a lo convencional, porque nos regresa a una semilla para crecer de nuevo, porque nos enseña cómo lidiar con el dolor, porque nos recuerda que todos somos efímeros y por tanto cada persona que conocemos y cada momento que gozamos es irrepetible. En fin, porque lo esencial [en este libro y en la vida] es invisible para los ojos [que no leen entre líneas].

¿Quién es Corina Rueda Borrero?

¿Cuánto te gustó este artículo?

Califícalo.

0 / 5. 0


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

desplazarse a la parte superior