Un dato aparte


Angélica Quiñonez_ Perfil Casi literal.jpgEstamos en pleno 2018 y sigo esperando una justificación razonable para la fobia infantil que demasiados escritores sostienen cuando se habla de medios digitales. Hace unos días se publicó en esta revista un artículo relativamente controvertido al respecto. La autora dice: «si se desea realizar la práctica [de la escritura] correctamente es imperativo renunciar a las tentaciones de la comunicación». Ignoraré por un momento la deliciosa ironía de publicar ese tipo de mensaje en una revista virtual para preguntar si esta persona recuerda la lección de primero básico sobre las funciones de la comunicación (este diagrama puede ayudar) o si alguna vez se le ha ocurrido abrir un libro de Marshall McLuhan.

Llamo a esa perspectiva una fobia infantil porque se fundamenta en la ignorancia y se asiste con adoctrinamientos y vicios. Para empezar, muy pocas personas son conscientes de la influencia que tienen en sus mentalidades los medios y mensajes que consumen, especialmente a través de la tecnología. Umberto Eco afirmaba que los medios digitales les daban una voz a los idiotas, pero no es como si las personas estuviesen obsesionadas con las obras de Cervantes antes de la emergencia del Facebook. Nuestra demanda de mejor o peor arte no es culpa de los medios que nos empujan tests de personalidad o memes, sino un hábito que sosegamos con nuestro propio discurso. Sí, ya sé que cualquier idiota tiene un blog o una cuenta de Twitter, pero esos también son los medios que alimentan las joyas narrativas en The New Yoker o TOR.com, un medio que, por cierto, ha alojado a los patitos feos de la literatura contemporánea como la fantasía y la ciencia ficción. Así que voy a pedirles, por favor, que no culpen a Buzzfeed por su propia pereza para buscar y compartir buenos contenidos.

Ahora bien, hay otro factor en esta ecuación que se origina en la manera tan retrógrada como se trabaja la tecnología en el tercer mundo. Suelo decir que la literatura es democrática porque permite que sociedades sin desarrollo económico o científico presenten un aporte a la humanidad: Guatemala, Austria y Bélgica tienen la misma cantidad de laureados en el Nobel de esa categoría. Sucede lo mismo con el código de programación. Sin embargo, me sentí profundamente decepcionada en el reciente capítulo de Google I/O Guatemala, donde nuestros supuestos exponentes de la tecnología repitieron clichés como «el contenido es el rey» y el concepto de innovación se redujo a una presentación sobre el nuevo y sobrevalorado edificio para una universidad privada. Desde 2015, más de la mitad de la población mundial tiene acceso a internet, y aquí estamos en las fronteras de Macondo, ignorando el valor de esos datos, las necesidades de esa comunidad y la manera en que podemos construir proyectos más comprometedores y valiosos que una serie de posts para Facebook.

Por miedo a la competitividad global, la ciencia y la tecnología que se desarrollan en el tercer mundo aspiran a poco más que la mediocridad. Quizá esto explica, parcialmente, la fabricada enemistad entre autores literarios y medios digitales, pero lo que veo es una falta de atención. Conocer y explotar la comunidad digital nos reta a hacer un arte distinto, progresivo y disruptivo incluso. La ciencia de los datos ha dado a luz a contenidos con valor artístico y reconocimiento popular, como sucede con la aclamadísima Stranger Things, o bien, para citar un ejemplo literario, el controversial cuento de Kristen Roupenian, Cat Person. El arte, a fin de cuentas, es un discurso para transformar mentalidades y conquistar espacios: físicos, simbólicos o virtuales. Y es evidente que pocas personas saben ver las oportunidades porque inventan pecados y tentaciones. Pero de nuevo, el papel pixel aguanta con todo, incluso con los cobardes.

¿Quién es Angélica Quiñonez?

¿Cuánto te gustó este artículo?

Califícalo.

0 / 5. 0


1 Respuesta a "Un dato aparte"

  1. Marvin Ventura dice:

    La tecnologia es buena pero la usamos de forma incorrecta, como dice el articulo cualquiera puede tener un blog o twiter o facebook lor poner solo unos ejemplos y se ven unas cosas!!…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

desplazarse a la parte superior